La isla caribeña de Bonaire decidió eliminar las restricciones que limitaban la importación de bienes desde Venezuela, según anunció la diputada bonairense Jolinda Craane.
Hasta ahora, el municipio insular de Países Bajos solo podía importar frutas, hortalizas y materiales de construcción desde la nación vecina, pero a partir de ahora se podrá acceder a una mayor variedad de productos.
“La reapertura de la frontera marítima con Venezuela fue un paso importante para los residentes y empresas de Bonaire”, afirmó Craane, quien destacó que “esta expansión ofrece más oferta a precios más bajos, más apoyo al poder adquisitivo de los consumidores”.
Excepciones y requisitos
Sin embargo, no todo está permitido. El vicepresidente de la Cámara de Comercio de La Vela de Coro, en el estado Falcón, Juan Gotopo, explicó que se mantienen algunas excepciones para las exportaciones desde Venezuela, con el objetivo de prevenir “riesgos naturales y para la salud pública”, recoge Banca y Negocios.
“Aún no se permite la importación de animales vivos, carne, despojos comestibles, leche, huevos y otros productos animales, a menos que lo haga una empresa con sede en Bonaire”, precisó Gotopo en sus cuentas en redes sociales.
Además, los exportadores venezolanos deben cumplir con una serie de requisitos sanitarios y aduaneros para poder enviar sus mercancías a Bonaire.
Un hito histórico
La reactivación del comercio entre Venezuela y Bonaire se produjo en julio de este año, cuando llegó a la isla el barco María de la Paz, con alrededor de 20 toneladas de frutas y hortalizas.
Esta fue la primera embarcación venezolana que arribó al puerto de Bonaire, luego de 4 años y 5 meses sin intercambio comercial entre ambos territorios.
El hecho fue celebrado por las autoridades y los empresarios de ambos países, que esperan fortalecer sus vínculos económicos y culturales.
