El lunes 18 de diciembre, el ejército surcoreano informó que Corea del Norte había lanzado al menos un proyectil balístico, solo unas horas después de otro disparo de un proyectil de corto alcance por la noche. El proyectil salió de las cercanías de la capital, Pionyang, y fue el más reciente de una serie de lanzamientos de este tipo desde julio.
En ese mes, el régimen norcoreano disparó su proyectil más potente, el Hwaseong 18 de combustible sólido. Es una tecnología nueva que el régimen lleva un año perfeccionando. Aún no se ha confirmado si el lanzamiento del lunes 18 de diciembre también usó combustible sólido.
Gesto provocador hacia submarino nuclear de USA
Este lanzamiento de proyectil coincidió con la escala de un submarino nuclear estadounidense en el puerto de Busan, en Corea del Sur. En un gesto desafiante, Corea del Norte ajustó la distancia de vuelo para que fuera la misma que la del submarino, enviando el mensaje de que Pionyang tiene capacidad de ataques precisos.
No obstante, el proyectil cayó en el Mar de Japón, muy lejos del puerto de Busan. Según un alto funcionario del Ministerio de Defensa japonés, se trataba probablemente de un proyectil balístico intercontinental (Icbm) que podía volar más de 15.000 km y, por lo tanto, llegar a “todo el territorio de Estados Unidos”.
Foto: Kcna.
“Seria amenaza para la paz y la seguridad”
En un informe conjunto, Seúl y Washington condenaron estos lanzamientos de proyectiles, que “representan una seria amenaza para la paz y la seguridad de la península coreana y de la comunidad internacional”, destacó la presidencia surcoreana en un comunicado publicado tras una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional celebrada el lunes.
En un comunicado, el portavoz del Departamento de Estado estadounidense afirmó que “estos lanzamientos, al igual que los otros lanzamientos de proyectiles balísticos realizados por Pionyang este año, violan varias resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas”. Junto con su socio japonés, prometieron responder a estos lanzamientos, sin dar más detalles.
El viernes 15 de diciembre, Estados Unidos y Corea del Sur participaron en Washington en la segunda sesión del Grupo Consultivo Nuclear, enfocada en la disuasión nuclear en caso de conflicto con el Norte. En esta reunión, la Casa Blanca advirtió de que cualquier ataque nuclear por parte de Pionyang pondría fin al régimen de Kim Jong-un.
En respuesta, el domingo 17 de diciembre, un portavoz del Ministerio de Defensa norcoreano denunció un plan de los aliados para añadir un ejercicio nuclear a sus maniobras militares conjuntas anuales del próximo año. “Se trata de una declaración abierta de confrontación nuclear destinada a convertir en un hecho consumado el uso de armas nucleares contra la Rpdc”, afirmó el ministerio en un comunicado publicado por la agencia oficial de noticias norcoreana Kcna.
Foto: Kcna.
El respaldo de China a Corea del Norte
Por su parte, China ha brindado su respaldo a Corea del Norte, como principal apoyo político y económico de este país aislado que es objeto de numerosas sanciones internacionales. “Frente a las turbulencias internacionales, China y Corea del Norte siempre se han apoyado firmemente y han confiado la una en la otra”, dijo el jefe de la diplomacia china, Wang Yi, en una reunión en Pekín con el viceministro norcoreano de Asuntos Exteriores, Pak Myong Ho, según un informe diplomático chino.
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Con información de RFI.
