El Banco Mundial anunció el martes que canceló su plan de financiamiento en Uganda, tras la entrada en vigor de una salvaje ley, contraria a los derechos humanos (DD. HH.), que castiga la homosexualidad con penas severas, incluyendo la muerte.
El organismo informó que después de que se aprobara la ley, envió un equipo al país africano para evaluar la situación, y determinó que se necesitaban “medidas adicionales para asegurar que los proyectos se realizaran de acuerdo” a los estándares del Banco Mundial.
“La Ley contra la Homosexualidad de Uganda va en contra de los valores fundamentales del Grupo del Banco Mundial. Creemos que nuestra visión de erradicar la pobreza en el planeta habitable solo puede tener éxito si incluye a todos, sin importar su raza, género o sexualidad”, dice un comunicado.
En este sentido, la entidad resaltó que esta ley “socavaba esos esfuerzos”, ya que “la inclusión y la no discriminación están en el centro” de su trabajo. “Nuestro objetivo es proteger a las minorías sexuales y de género de la discriminación y exclusión en los proyectos que financiamos. Estas medidas están en discusión con las autoridades”, explicó, aclarando que no presentaría ningún financiamiento público hasta que se probaran medidas en este aspecto.
Uganda ya prohibía los actos homosexuales, pero la nueva ley endureció más los castigos, con una posible pena capital si las relaciones involucraban a menores de edad o implicaban la transmisión de una enfermedad. Una vez que se promulgó la reforma, la única forma de detener su aplicación era mediante los tribunales.
Las organizaciones defensoras de Derechos Humanos criticaron el texto, al igual que Gobiernos como el de Estados Unidos, importante socio comercial del país africano.
