La Fiscalía de Bolivia presentó una acusación formal contra la exmandataria interina Jeanine Áñez, el excívico Luis Fernando Camacho y otros seis implicados en los hechos de violencia que provocaron la salida del poder del exgobernante Evo Morales en 2019.
Telesur informó que la acusación formal incluye también al excívico de Potosí Marco Pumari, el exministro de Defensa Luis Fernando López; los exjefes militares Williams Kaliman y Carlos Orellana; el exjefe policial Yuri Calderón y el exinspector de las Fuerzas Armadas Jorge Fernández.
La Fiscalía pidió 20 años de prisión para Áñez, Camacho y otros tres acusados. Camacho está recluido desde el 28 de diciembre de 2022 en el penal de Chonchocoro en La Paz, por el caso Golpe de Estado I. López, Kaliman y Calderón se encuentran fugitivos.
Pruebas contra los acusados
El fiscal Omar Mejillones anunció la acusación formal tras haber concluido la investigación, en la que se recolectaron pruebas como los movimientos bancarios de Luis Fernando Camacho durante la crisis de 2019, así como el testimonio del asistente Williams Kaliman, que reveló los nexos con Luis Fernando López.
La investigación también estableció que Jeanine Áñez y Marco Pumari están bajo detención preventiva.
Áñez tiene además una condena firme de 10 años por el caso Golpe de Estado II o la forma cómo asumió el poder, en sesiones legislativas sin quorum y fuera de la línea de sucesión.
La denuncia fue presentada a finales de 2020 por la exlegisladora del Movimiento al Socialismo (MAS) Lidia Patty, a la que se sumó el Ministerio de Gobierno. La acusación formal da paso al juicio penal por delitos como terrorismo, que tiene una pena de 15 a 20 años de cárcel, financiamiento al terrorismo, cohecho activo, seducción de tropas, instigación pública a delinquir, asociación delictuosa y uso indebido de bienes y servicios públicos.
Con información de Telesur.
