La Cámara de la Industria Farmacéutica (Cifar) informó a EFE que el mercado farmacéutico de Venezuela aumentó un 6,4% entre enero y octubre de este año, en comparación con el mismo período de 2022.
Según el gremio, se colocaron unos 173,09 millones de medicamentos en el mercado hasta el mes de octubre, mientras que en el mismo lapso del año anterior se distribuyeron unos 162,56 millones en las farmacias del país.
El sector también reportó que el mercado se expandió un 18,9% en octubre, en relación con el mismo mes de 2022, al pasar de 17,55 millones de medicamentos a unos 20,87 millones.
No obstante, Cifar señaló que la industria enfrenta el problema del “bajo” poder adquisitivo en el país, donde el salario mínimo y la pensión —que se mantienen en 130 bolívares desde marzo de 2022, pese a las presiones de trabajadores y pensionistas— equivalen a 3,6 dólares al mes, al cambio oficial.
Retos y proyecciones del sector farmacéutico
La cámara farmacéutica solicitó a las autoridades acceso a financiación bancaria, creación de leyes que protejan la industria y reducción arancelaria para la importación de materias primas, entre otras medidas.
Cifar estimó un crecimiento del 5,6% para este 2023, cuando prevé que se distribuya un total de 210 millones de unidades, frente a los 198,77 millones de medicamentos del año pasado.
El sector farmacéutico operó a un 38,4% de su capacidad instalada durante el tercer trimestre de este año, una caída de 2,6 puntos frente al 41% de operatividad del mismo período en 2022, según la Confederación de Industriales de Venezuela (Conindustria).
Esta gremial indicó recientemente que los factores que afectan la actividad industrial son la baja demanda, la competencia de productos importados, la falta de financiación, los “excesivos” tributos, el “entorno macroeconómico (inflación y devaluación)” y el comercio ilícito, principalmente de productos que incumplen “normas tributarias” y el contrabando, además de falsificaciones.
