La Federación Nacional de Ganaderos de Venezuela (Fedenaga) solicitó este martes al fiscal general, Tarek William Saab, una audiencia o reunión para aclarar la situación que viven los productores, debido a la falta de combustible y las recientes acusaciones y cargos en contra de agricultores.
En el comunicado citado por Minuta Agropecuaria, la federación dijo que los productores están desesperados por no encontrar cómo sacar su producto al mercado, por lo que han tenido que deshacerse en las zonas de producción alejadas de los centros de consumo.
“Quizás las imágenes son dantescas en un país con necesidades, pero en la investigación le pedimos se ponga en el lugar del humilde labriego, pues en los campos se está perdiendo la comida por no poder sacarla a los mercados, al no tener combustible necesario y las cosechas no esperan”, expresó.
Piden liberación de los detenidos
En el texto, Fedenaga también pidió que los agricultores detenidos sean liberados y atendidos por los entes gubernamentales, para que sigan trabajando por la producción del país.
El pasado sábado 17 de junio, Saab designó a la Fiscalía Número 23 Nacional con competencias en delitos económicos para iniciar investigaciones por los videos que circularon en redes sociales en las últimas semanas en los que se mostraban a productores lanzar a ríos sus cosechas de tomate, zanahorias o cambures al alegar pérdidas para trasladarlas a comercializar en diferentes regiones del país por la falta de gasolina o gasoil.
Un día después, Saab anunció la detención del agricultor merideño Ysnet Antonio Rodríguez Mambel, por lanzar su cosecha de zanahorias a un río.
El fiscal general, Tarek William Saab, anunció el lunes la detención de un segundo productor, en el estado Trujillo.
El hombre quedó identificado como Jhonar Barazarte Trompetero, a quien como ocurrió con un agricultor del estado Mérida, acusarán de boicot y violar la Ley de Precios Justos.El fiscal general aseguró que Barazarte Trimpetero actuó “al margen del orden jurídico (y) destruyó gran cantidad de alimentos (tomates) lanzándolos al río y violando así la Ley de Precios Justos (Boicot)”.