El director general del consorcio armamentístico ruso Kaláshnikov, Vladímir Lepin, aseveró este viernes que no será activada en 2022 la fábrica venezolana de fusiles AK-103 y municiones, alegando problemas logísticos.
“No, no se podrá en marcha”, afirmó Lepin al ser abordado sobre el tema.
En función de esto, sostuvo que el retraso se debe a problemas de orden logístico.
En 2021, en octubre, el enviado de la Presidencia de Venezuela Adán Chávez anunció que la construcción de la fábrica de fusiles Kaláshnikov —pendiente desde 2006— sería finalizada en el segundo semestre de este año.
El exsenador ruso Serguéi Popelniújov, quien estaba a cargo del proyecto, fue condenado en 2017 a siete años de cárcel por el robo de más de 1.000 millones de rublos (USD 16 millones al tipo de cambio de entonces).
