El economista y director de Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros, advirtió que el eventual regreso de las sanciones estadounidenses no será bueno, pero que su impacto será menor y por ende no representará una tragedia para Venezuela.
Oliveros explicó que el posible escenario es un marco restrictivo en término de sanciones; pero que ello no conducirá al país a una crisis como en otrora.
“La licencia 44 es muy amplia, abarca muchas áreas, petróleo, oro, sistema financiero y deuda, así que no necesariamente tiene que revocarse completa, sino en aspectos puntuales. Puede ser revocada y sustituida por una más restrictiva”, argumentó.
En entrevista a Mundo UR, resaltó que el marco tan flexible que propició dicha licencia va a desaparecer. Además, insistió en que la desventaja principal es que solo duraba seis meses, por lo que ningún inversionista podía planificar algo con tan poco margen de tiempo.
Agregó que ello también provocó que los beneficios de la licencia fueran bastante limitados. No obstante, permitió la importación de vitales diluyentes y aditivos para así mejorar el aspecto del combustible y permitió exportaciones hacia la India.
“Nuestro escenario base manteniéndose la licencia era de un crecimiento de 10% con ingresos de 17.000 millones al año por la vía petrolera, en este marco de una licencia revisada o revocada, sería de 5% con ingresos de 14.000 millones, es decir que el gobierno tendría una disminución de ingresos de 3.000 millones que no es suficiente para que el gobierno ceda en la negociación política”, apuntó.
Oliveros también indicó que no se espera una gran devaluación ni aumento de inflación si hay reimposición de sanciones. “La operación de Chevron, Eni y Repsol está amparada por la licencia 41 que no está en revisión”, sostuvo.
