El Ministerio de Ecosocialismo de Venezuela informó que un ejemplar de la especie laúd (Dermochelys coriacea), la tortuga marina más grande del planeta, soltó sus huevos en una playa de Margarita, y luego fueron llevados a un vivero para su conservación.
Las autoridades detallaron que la tortuga depositó un total de 120 huevos, los cuales “serán resguardados” por esta cartera de Estado, que se comprometió a seguir “con la labor de preservar estos reptiles“.
El Instituto Nacional de Parques, con la colaboración de la Guardia Nacional Bolivariana, ha estado al frente de la vigilancia del proceso de anidación. A través de una publicación en la red social X, Inparques informó que los huevos permanecerán en el vivero “hasta el momento de su eclosión”, para luego ser reintroducidos en su entorno natural.
Este esfuerzo se enmarca dentro del Programa de Conservación de Tortugas Marinas del estado Nueva Esparta, al cual Margarita pertenece. El programa busca “garantizar la reproducción y supervivencia de esta especie vital para mantener la salud de los lechos de pastos marinos, además de ser el principal depredador de esponjas y medusas”.
En un esfuerzo previo, en mayo de 2023, el Ministerio de Ecosocialismo liberó 20.000 tortugas “arrau” en el Amazonas, una iniciativa parte de un amplio plan de protección para las especies amenazadas. Las tortugas fueron reintroducidas en ‘Isla de Cuba’, un santuario natural designado para la preservación de la fauna y, en particular, de la ‘tortuga del Orinoco’.
