El Tribunal General de la Unión Europea (Tgue) excluyó a dos prominentes empresarios de su lista de sanciones contra Rusia. Petr Aven, de origen ruso-letón, y Mikhail Fridman, de nacionalidad ruso-israelí, ambos accionistas clave del grupo empresarial Alfa Group y de su subsidiaria Alfa Bank, fueron liberados de las restricciones impuestas por la UE.
El Tribunal, en una declaración oficial, señaló que “las razones esgrimidas por el Consejo (Europeo) no pueden ser tenidas en cuenta para incluir y mantener a los dos empresarios en esa lista” de individuos sancionados.
Anteriormente, la UE había congelado los activos de ambos empresarios, acusándolos de brindar soporte material y financiero al Gobierno ruso, lo cual habría facilitado la incursión militar en Ucrania en febrero de 2022.
Aven y Fridman, en su defensa, argumentaron que las evidencias presentadas por la UE, que sugerían su apoyo a políticas y acciones en detrimento de la soberanía territorial de Ucrania carecían de fiabilidad y credibilidad.
Reacción de Fridman y Aven ante la resolución
El Tribunal General determinó que “ninguno de los motivos expuestos en los actos iniciales está suficientemente fundamentado y que, por tanto, la inclusión de los señores Aven y Fridman en las listas no estaba justificada”.
En una entrevista con el medio RBC, Fridman expresó que tanto él como su colega Pyotr Aven se encontraban “satisfechos” con el veredicto que los desvincula de las sanciones de la UE.
Este evento marca otro episodio en el que el sistema judicial europeo revoca decisiones previas de sanciones, poniendo en tela de juicio los criterios utilizados por la UE para la inclusión de ciudadanos rusos en dichas listas.
En casos anteriores, figuras como Violetta Prigozhina, madre del difunto líder del grupo Wagner, Yevgeni Prigozhin, y Nikita Mazepin, ex piloto de Fórmula 1, también fueron retirados de la lista de sancionados por el mismo tribunal.
Con información de DW.