Acreedores de Venezuela y su empresa petrolera estatal presentaron dos demandas en Nueva York el miércoles para validar un acuerdo de agosto que busca “congelar” o suspender los plazos legales para reclamar sus pagos.
Venezuela incumplió con unos 60.000 millones de dólares (USD) de sus bonos internacionales en 2017. Su deuda fue emitida bajo la ley de Nueva York, que les da a los tenedores seis años para demandar al país en caso de impago.
En agosto, los acreedores dijeron que apoyaban una propuesta del Parlamento opositor venezolano elegido en 2015 para extender el plazo legal.
En un comunicado nocturno reseñado por Reuters, el Comité de Acreedores de Venezuela dijo que había presentado una reclamación por la deuda junto con otros acreedores y en coordinación con el Comité de Protección de Activos (APC) y la junta administrativa ad hoc de la firma estatal Petróleos de Venezuela.
Luego pidieron al tribunal que terminara esos procesos, pero manteniendo los derechos de los acreedores para demandar hasta finales de 2028.
“Estas demandas buscan garantizar la ejecutabilidad del anuncio hecho en agosto de este año… Congelando los plazos legales y prescriptivos aplicables a los bonos y las acciones de ejecución relacionadas hasta el 31 de diciembre de 2028”, dijo el Comité de Acreedores de Venezuela en un comunicado por correo electrónico.
“Sin esta solución cooperativa alcanzada en coordinación con el APC y la Junta ad hoc, las obligaciones fiduciarias de los acreedores podrían haber requerido iniciar una litigación directa extensa y costosa contra Venezuela y Pdvsa”, puntualizó.