Una mafia de sicarios y carteles en México, presuntamente habría secuestrado a al menos 10 venezolanos oriundos del estado Apure, Valencia y Maracay, y para liberarlos y no acabar con sus vidas solicitan la cantidad USD 7.000.
En un video aparece el amenazado llorando y arrodillado. “Mamá, ayúdame por favor”, dice desesperado el venezolano Ronald Alvarado. La información fue difundida a través del portal digital Informe25.com.
A través de las redes sociales, aparecen los antisociales amenazando a los venezolanos con armas largas, exigiendo la cantidad de dinero. De acuerdo con portal Informe25, entre el grupo, se encuentra una mujer, quien es novia de uno de los venezolanos, y aseguran que ha sido violada.
Los tendrían retenidos en una locación entre Monterrey y El Paso: “Lo de los muchachos secuestrados en México es verdad, y aún no han liberado a nadie. Son dos mujeres y un hombre de Valencia, dos hermanos de San Juan de Payara en el estado Apure, más la novia de uno de ellos que es de San Rafael de Atamaica, y dos personas de Maracay”, reseña Informe25.
Los antisociales se comunicaron con familiares de las víctimas, según reporta Notizulia citando a Informe25.
“Nosotros éramos un grupo de 12 personas, pero en Chihuahua nos bajaron del tren los de migración los policías estatales, y los taxistas trabajan para los malditos carteles… Nos bajaron del tren y cada quien buscó para donde ir, y agarramos tres taxis y los taxistas nos llevaron a los cárteles”, relató una persona que estuvo en el momento de los secuestros pero logró escapar.
“No éramos los únicos, solo que entre la gente y entre los hombres armados que estaban adelante, nos bajamos un pana y yo, los otros se quedaron en los taxis y corrimos por la calle y nos ayudó una viejita”, sumó.
“Nadie nos persiguió gracias a Dios. Pero la misma señora mexicana nos dijo que no denunciáramos a la policía, porque ellos estaban con los cárteles”, detalló.
Así, agregó que los policías en la vía a Mata Moros “detuvieron a un grupo de nueve personas, entre esos estaban dos primos y sus novias; y terminaron en las manos de los cárteles”.
Según un testigo, les quitaron USD 950 a cada uno y a los que pagaron los liberaron a 50 metros de un puesto de migración y la Guardia Nacional, dijo un testigo.
El mismo migrante refiere que los cárteles dieron la orden desde la frontera con Guatemala y México para adelante, de no venderle pasaje a los inmigrantes.
“Lo hacen para que caminen y otros paguen piratas, y donde venden pasajes saben que es una estafa, por que en el primer punto de control, migración baja a la gente para que camino (…). Todos terminan pagando los piratas que los mismos carteles tienen en todos los pueblos… Toca caminar en grupo grande, y a esos esos grupitos de cinco a ocho personas; los montan y se los llevan”, puntualizó.