La presidenta del Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio), Tiziana Polesel aseguró este miércoles que el sector presenta grandes diferencias entre Caracas y el interior del país. Sin embargo, dijo que tienen un punto de encuentro en lo negativo de las ventas en el segundo trimestre con respecto al mismo periodo del año pasado.
En entrevista concedida a Unión Radio (UR), Polesel aseguró que el segundo trimestre de este año se han registrado cifras negativas por la voracidad fiscal que vive el país, ilícitos y la informalidad, además de la falta de créditos.
“Hemos visto cadenas comerciales con 15 y 20 puntos de venta y se han reducido a los que están en la capital o en algunas ciudades, la empresa no cierra, pero se disminuye la atención en algunas ciudades”, expresó.
Sostuvo que dichas desigualdades están atadas a la desatención de algunas zonas del país. “Ese repunte del año pasado entusiasmó a parte del comercio a invertir, con recursos propios, para abastecerse un poco más de inventarios que no se movieron porque llegaron en la desaceleración, ahora se encuentran con deudas que generan preocupación”, agregó.
Indicó que la formalidad es un “costo altísimo” para el comercio venezolano, debido a que tiene como competidor al comercio informal que se nutre de productos que ingresan sin pagar los tributos correspondientes y no pasan por los controles de calidad.
¿Qué dijo Conindustria?
Por su parte, el presidente de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), Luigi Pisella, señaló que también registraron un decrecimiento.
En este sentido, dijo que están usando un 30 % de la capacidad instalada para producir y afirmó que las industrias necesitan incentivos para aumentar la capacidad.
Finalmente, Pisella explicó que el objetivo en los próximos años será concretar las reuniones con el Gobierno de Nicolás Maduro en hechos tangibles para aumentar el potencial.
