El primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello se pronunció el miércoles sobre la investigación publicada por The Washington Post en la que denuncian casos de pedofilia cometidos por sacerdotes en el país.
Durante la transmisión de su programa semanal “Con el mazo dando”, Cabello señaló que la responsabilidad de todo “recae en manos de la iglesia católica”.
“La culpa no es de la iglesia católica, no, no –ironizó- ya es del sistema judicial, o sea que vuelvan a dar misa es culpa del sistema judicial según The Washington Post”, sostuvo.
El funcionario oficialista aprovechó la oportunidad para arremeter contra el cardenal Baltazar Porras, a quien tildó de “inmoral”.
“¿Baltazar Porras no es el jefe de la Iglesia Católica en Venezuela? ¿Por qué no aplica ese criterio político para que la Iglesia Católica se vuelva a llenar de feligreses? ¿Por qué las iglesias evangélicas le están ganando y otras iglesias, movimientos religiosos les están ganando? ¿Por qué? Por el poco criterio de quienes dirigen la Iglesia en Venezuela, pero éste critica a los políticos, yo no soy de la oposición, pero lo estoy criticando a él porque son unos inmorales, por la inmoralidad de un tipo como éste”, expresó.
En contexto
El pasado 21 de junio la periodista Ana Vanessa Herrero publicó una nota en The Washington Post en la que reveló que los sacerdotes condenados en Venezuela por abuso sexual regresaron al ministerio.
El diario estadounidense revisó diez casos ocurridos en el territorio nacional en los últimos años, que involucran denuncias de abuso sexual infantil.
Para el desarrollo del trabajo la periodista entrevistó a líderes católicos, policías, funcionarios judiciales y víctimas, además de revisar documentos policiales y judiciales.
“En la mitad de los casos, que datan de 2001 a 2022, se encontró sacerdotes condenados por cargos de abuso que fueron liberados antes de tiempo o que no cumplieron ningún tiempo en prisión. En al menos tres casos, a los sacerdotes se les permitió regresar al ministerio. Los entrevistados señalan que hay un patrón que sugiere la colusión entre un sistema judicial corrupto y la Iglesia para proteger a los perpetradores en lugar de a las víctimas”, reseña The Washington Post.
Los analistas consultados por el medio indicaron que en Venezuela hay tres razones por las que las acusaciones no han sacudido a la Iglesia: el foco está puesto solo en la agitación política, el sistema judicial fracturado y la influencia de la institución religiosa.
“Se han pospuesto tantas cosas debido a la agitación social y política. Una de las instituciones que más respeta a los venezolanos es la Iglesia católica. Eso limita cuánto puedes actuar”, dijo David Smilde, sociólogo de la Universidad de Tulane, cuya extensa investigación sobre el país se ha centrado en parte en la religión.
