El Centro de Predicción del Clima Espacial (Swpc), perteneciente a la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (Noaa) y bajo la égida del Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos, puso sus ojos en la actividad solar tras detectar una secuencia de erupciones y eyecciones de masa coronal (CME) iniciadas el 8 de mayo.
Los expertos en meteorología espacial declararon una alerta de nivel G4, la cual señala una vigilancia intensiva ante una posible tormenta geomagnética para la noche de este viernes 10 de mayo.
Se anticipa que erupciones solares adicionales podrían extender las condiciones de tormenta geomagnética a lo largo del fin de semana.
Asimismo, se espera que estos eventos cósmicos, previstos para arribar alrededor del mediodía de hoy, se mantengan activos hasta el domingo 12 de mayo, lo que sugiere un período de notable actividad solar y eventuales retos para la infraestructura tecnológica terrestre.
De acuerdo con fuentes oficiales estadounidenses, el origen de estas CME se encuentra en un conjunto de manchas solares de gran tamaño y complejidad magnética, identificado como la región 3664 de la Noaa. Dicha región se extiende aproximadamente 16 veces el diámetro de nuestro planeta.
Posibles consecuencias
El posible impacto de estas turbulencias geomagnéticas sobre el campo magnético terrestre y nuestra infraestructura tecnológica no es menor.
Las consecuencias de las CME incluyen posibles fluctuaciones de voltaje en redes eléctricas; desajustes en la orientación de satélites en órbita baja; interrupciones en sistemas de navegación satelital (GPS); así como alteraciones en las comunicaciones por radio de alta frecuencia (HF).
Frente a la inminente llegada de las CME, la Noaa insta a científicos, entidades gubernamentales y ciudadanos a mantenerse al tanto de los desarrollos y a elaborar estrategias de contingencia que permitan enfrentar los riesgos vinculados a estas severas tormentas geomagnéticas.
Con información de Meganoticias.
