Michael Fakhri, relator especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), alertó este miércoles que en Venezuela se mantienen los problemas para el acceso a los alimentos, sobre todo en los “grupos vulnerables” como niños, mujeres y privados de libertad.
“Gente de todo el país sigue teniendo problemas para acceder a alimentos buenos y sanos”, advirtió en rueda de prensa tras concluir su visita a la nación. En dicha estadía, se reunió con ONG, autoridades venezolanas y otras agrupaciones civiles.
Asimismo, manifestó que la dolarización de facto en Venezuela, bajos salarios y alta inflación “debilitan el poder adquisitivo”. En consecuencia, se incrementa el riesgo de padecer inseguridad alimentaria, señaló.
Para hacer frente a esto, resaltó que algunos ciudadanos recurren a “mecanismos negativos”. En ese punto, hizo mención de la reducción del tamaño de las porciones de comidas, saltarse alguna o comprar productos con poco valor nutricional.
“Me preocupan mucho los niños… conocí muchos testimonios de todo el país de que los niños están cada vez más expuestos a riesgos (como) separación familiar, trabajo infantil, explotación sexual, violencia física y abusos”, acotó.
Enfatizó que los menores de cinco años de edad y embarazadas o en período de lactancia son “los más afectados” por la desnutrición. Aún así, no ofreció cifras a causa de la falta de datos por parte del Estado.
Fakhri afirmó que algunas mujeres incluso “se ven obligadas a intercambiar sexo por comida”, reseñó EFE.
Por último, hizo crítica hacia los Clap. Advirtió que el programa se ha convertido “en un sistema de clientelismo” y no un mecanismo para “la liberación del hambre”.