El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, arrasó el jueves en los caucus presidenciales republicanos de Nevada al conseguir el 99% de los votos, en un evento donde fue el único aspirante de envergadura que participó.
De esta forma, el magnate obtuvo su tercera victoria estatal al hilo en su afán por hacerse con la nominación para las elecciones presidenciales.
Nikki Haley, exembajadora estadounidense ante la ONU y principal adversaria de Trump, declinó participar en dichas asambleas partidarias. Estas son las únicas del estado de Nevada que cuentan para el nombramiento republicano dado a que aportan electores.
Para Haley, es un proceso “injusto” que favorece al expresidente. En su lugar, optó por participar en las primarias presidenciales del martes; sin embargo, quedó por debajo de la opción “ninguno de estos candidatos”. Por ende, significó una derrota humillante para la aspirante, reseñó Clarín.
La victoria de Trump en Nevada le garantiza la gran mayoría de los 26 delegados estatales. En total, requiere de 1.215 para asegurarse oficialmente la nominación republicana, números que podría lograr en marzo.
El próximo desafío será el 24 de febrero en las primarias republicanas en Carolina del Sur, estado natal de Haley.