La demanda de trabajadores en Estados Unidos se enfrió en junio, al alcanzar los 9,58 millones de puestos vacantes, el nivel más bajo desde abril de 2021, según los datos publicados por el Departamento de Trabajo. Este dato apunta a una moderación en el ritmo de recuperación del mercado laboral, en línea con las previsiones de la Reserva Federal.
El número de empleos disponibles en junio supone una leve caída de 34.000 respecto a mayo, pero una fuerte reducción de 1,38 millones en comparación con el mismo mes del año pasado.
La oferta de empleo en el sector privado se contrajo ligeramente hasta los 8,45 millones, mientras que en el sector público se incrementó hasta los 1,13 millones.
Por sectores, hubo más vacantes en salud y asistencia social (+136.000) y en el Gobierno estatal y local, sin contar educación (+62.000). Por el contrario, hubo menos ofertas en transporte, almacenamiento y servicios públicos (-78.000), educación pública a nivel estatal y local (-29.000) y en el Gobierno federal (-21.000).
Menos contrataciones
Además de la menor oferta de empleo, en junio también se registró una disminución en las contrataciones, que bajaron a 5,9 millones, frente a los 6,23 millones de mayo y los 6,44 millones de junio del año pasado.
El informe de empleo del Departamento de Trabajo había mostrado que en junio la economía estadounidense creó 209.000 nuevos empleos no agrícolas, una cifra inferior a los 306.000 de mayo y por debajo de lo esperado por el mercado. No obstante, la tasa de desempleo bajó una décima, hasta el 3,6%.
Así, aunque el mercado laboral estadounidense mantuvo su tendencia positiva al sumar 30 meses seguidos creando empleo, el dato de junio fue el más bajo desde diciembre de 2020, lo que indica que la política monetaria más restrictiva de la Reserva Federal empieza a afectar también a las contrataciones.
