USA Gymnastics, el Comité Olímpico y Paralímpico de Estados Unidos (EE.UU.) y sus aseguradoras han acordado financiar un acuerdo de 380 millones de dólares con las víctimas del antiguo médico del equipo nacional Larry Nassar, concluyendo una batalla legal de cinco años.
La suma es una de las mayores cifras jamás registradas para las víctimas de abusos sexuales e incluye a cientos de atletas que fueron agredidos durante tres décadas, refirió The Wall Street Journals.
La decisión de la última aseguradora retenida se confirmó el lunes en una audiencia en el tribunal de Indianápolis. Además, el acuerdo incluye una contribución directa de alrededor de 34 millones de dólares y un préstamo de 6 millones de dólares a USA Gymnastics.
La demanda contra USA Gymnastics sobre Nassar fue presentada en septiembre de 2016 por el medallista de bronce olímpico de 2000 Jamie Dantzscher. A medida que se acumulaban más demandas legales, USA Gymnastics se declaró en bancarrota a finales de 2018. Para entonces, la indignación por una serie de revelaciones sobre la respuesta del movimiento olímpico a Nassar había contribuido a la dimisión de muchos de los altos cargos, incluidos los líderes de ambas organizaciones, Steve Penny y Scott Blackmun.
Aún así, se necesitaron tres años más para llegar a un acuerdo, durante los cuales algunas de las mayores estrellas del deporte lanzaron una oleada de críticas a las organizaciones para las que habían competido.
Denuncias
Los abogados que representan a las víctimas habían acusado a USA Gymnastics, para la que Nassar trabajó desde la década de 1990 y en cuatro Juegos Olímpicos, de crear un ambiente lleno de presión sobre los atletas para que fueran considerados cumplidores, creando una atmósfera en la que un depredador podía prosperar.
Entre los supervivientes se encuentran otros miembros de los equipos olímpicos de 2016, 2012 y 2000, de los equipos mundiales de 2011 y 2010, y otros miembros de equipos nacionales que se remontan al menos a 1996.
Muchas de las gimnastas eran jóvenes adolescentes en la cúspide de su participación en la organización que supervisa el deporte en Estados Unidos y controla el acceso a las principales competiciones. Fueron objeto de abusos en las competiciones, en los campamentos de entrenamiento mensuales obligatorios y después de que Nassar les recomendara.
También salió a la luz que USA Gymnastics llevó a cabo una investigación interna inicial secreta de cinco semanas sobre las preocupaciones sobre Nassar en 2015 antes de acudir a las fuerzas del orden, que pasó por alto a algunas gimnastas con preocupaciones, incluyendo a Biles, y que el entonces llamado Comité Olímpico de Estados Unidos tuvo conocimiento desde el principio de las acusaciones de Nassar dentro de USA Gymnastics, pero esencialmente las ignoró.
Otras víctimas
Además de su trabajo con USA Gymnastics, el exmédico osteópata trató a cientos de mujeres y niñas en la Universidad Estatal de Michigan, que resolvió demandas por 500 millones de dólares en 2018. Las gimnastas de élite estaban entre esos demandantes, argumentando que Michigan State no respondió a las primeras quejas contra Nassar, incluso en 2014, un año antes de que USA Gymnastics se enterara de las preocupaciones de sus atletas.
Las víctimas de Michigan también formaron parte del acuerdo con USA Gymnastics, diciendo que Nassar se basó en su reputación como médico del equipo estadounidense para convencerlas de que los tratamientos en los que las penetraba vaginalmente con sus dedos eran normales.
Algunas de esas víctimas incluyen a mujeres y niñas tratadas por él después de que fuera denunciado a las fuerzas del orden pero se le permitiera retirarse de USA Gymnastics en 2015.
Larry Nassar se declaró culpable de los cargos de abuso sexual y pornografía infantil y a principios de 2018 había sido condenado a una pena efectiva de cadena perpetua en prisión.
