El horror se ha desatado en el kibutz de Kfar Aza, una comuna agrícola situada a solo cinco kilómetros de la frontera con Gaza. El grupo Hamás ha perpetrado una nueva ofensiva que ha dejado “al menos 100 personas” muertas, según informaron varios corresponsales internacionales que acompañaron a las Fuerzas de Defensa Israelí (IDF, por sus siglas en inglés) al lugar de los hechos.
Entre las víctimas mortales se encuentran “al menos 40 bebés, algunos de ellos decapitados”, tal y como reveló un oficial del ejército israelí a una reportera de la cadena local i24 News. Se trata de una de las peores masacres atribuidas al grupo islamista desde que comenzó la nueva escalada del conflicto.
Kfar Aza fue fundado en agosto de 1951 por inmigrantes y refugiados judíos procedentes de Egipto y de la ciudad marroquí de Tánger. En 2021 tenía una población de 765 habitantes, aunque este dato tendrá que ser revisado después de lo vivido en las últimas jornadas.
El kibutz se ubica entre Netivot y Sderot, en la zona más castigada por la embestida de Hamás. En 1955 fue abandonado temporalmente, y dos años después renació. El pasado sábado, cuatro civiles del kibutz fueron secuestrados por Hamás, según presenciaron periodistas de la agencia AP.
Más de 1.600 muertos en el conflicto
El balance total de víctimas mortales por el conflicto entre Israel y Gaza supera ya las 1.600 personas. Israel ha confirmado más de 1.000, mientras Gaza, 680.
El general Itai Veruv describió el desolador panorama que encontraron en el kibutz:
“Esto no es una guerra. No es un campo de batalla: es una masacre. Ves a los bebés, a sus madres y sus padres, en las habitaciones y refugios donde trataron de ponerse a salvo… y cómo los terroristas los han matado. No es una guerra”.
Con información de ABC.
