El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, anunció que firmará una declaratoria de emergencia nacional por la llegada masiva de migrantes que ingresan en tránsito a ese país.
Esta declaración de emergencia permitirá destinar recursos para atender la situación que a su juicio “supera la capacidad institucional”. Además, señaló que la situación genera una presión en la comunidad, que está demandando una solución del problema.
Asimismo, expresó que los migrantes que no cumplan las leyes del país serán deportados a su país de origen, por lo que deben respetar a las autoridades y exhortó a los migrantes a “meditar quienes piensen venir a Costa Rica“.
“Esta situación amerita declarar una emergencia nacional que se vive en el país debido a la cantidad de personas que están pasando por nuestro territorio”, dijo Chaves.
El mandatario también anunció la deportación de un grupo de más de 20 migrantes que permanecen detenidos luego de ocasionar disturbios contra la policía de Paso Canoas, mientras intentaban controlar ventas ambulantes.
“Tenemos a 25 o 27 personas que se comportaron mal y ordené a la Dirección de Migración y Extranjería que ordene el proceso de deportación de las personas que hicieron disturbios hacia Venezuela o su país de origen”, aseguró.
Por su parte, los datos oficiales de Costa Rica revelan que en el mes de septiembre han ingresado 60.000 migrantes desde Panamá con destino a Estados Unidos. Mientras que en lo que va de año han cruzado cerca de 400.000 migrantes por la Selva del Darién, la mayoría de ellos venezolanos.
