La jueza estadounidense Beth Bloom tomó una decisión que resguarda las propiedades del magnate venezolano Raúl Gorrín en Miami (Florida) de ser incautadas por un acreedor venezolano.
La jueza Bloom dictaminó que, a pesar de las acusaciones y argumentos presentados por el acreedor, quien sostiene que los condominios de Gorrín “fueron comprados con estado robado y por lo tanto, presa fácil”, no procede la incautación de dichas propiedades.
La información fue anunciada en la red social X por el periodista Joshua Goodman de The Associated Press.
La magistrada cerró el caso, dejando intacto el patrimonio del empresario en suelo estadounidense.