El Gobierno del presidente Nicolás Maduro y la oposición venezolana llegaron a un acuerdo para revisar las inhabilitaciones políticas que pesan sobre varios dirigentes opositores. El anuncio se produjo la noche de este jueves, pocas horas antes de que se cumpliera el ultimátum dado por Estados Unidos para que se levantaran estas sanciones.
El acuerdo fue comunicado por el Gobierno de Noruega, que actúa como facilitador del proceso de negociación y diálogo entre las partes. Según el comunicado, se acordó “revisar las inhabilidades de acuerdo a los parámetros establecidos y, de cumplirse con los mismos, proceder al levantamiento de las mismas”.
Procedimiento acordado
El procedimiento acordado consiste en que cada uno de los interesados en presentarse a las presidenciales del próximo año, y que hayan sido inhabilitados por la Contraloría General de Venezuela, tendrán que acudir ante la Sala Político Administrativa del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) para ejercer un recurso contencioso administrativo y una solicitud de amparo cautelar.
Los interesados podrán aplicar a esta revisión entre el 1.° de diciembre y el próximo 15 de diciembre.
El TSJ será el encargado de pronunciarse sobre la demanda de revisión de la inhabilidad y tomará una decisión conforme con los términos de la Constitución venezolana.
El procedimiento indica que los demandantes se abstendrán de incorporar, tanto en sus alegatos como en declaraciones públicas, “conceptos ofensivos o irrespetuosos contra las instituciones del Estado”.
Además, cada uno de los solicitantes del levantamiento de las inhabilitaciones se compromete a respetar la Constitución, “honrar y defender la patria”, acatar la decisión del TSJ “que emane de este recurso” y rechazar cualquier forma de violencia en el ejercicio político.
Plazo de USA
La Administración del presidente estadounidense Joe Biden había condicionado no reimponer sanciones económicas contra el Gobierno de Maduro tras seis meses de alivio a que se permitiera antes de que terminara noviembre la participación de todos los actores políticos en las elecciones presidenciales previstas para el próximo año.
Horas antes del acuerdo, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, había manifestado que no habían “visto ningún progreso. Quedan 8 horas de día, así que veremos qué deciden hacer los venezolanos. Y no me adelantaré a decisiones sobre sanciones en un sentido u otro en el futuro”.
El acuerdo representa un avance en el proceso de negociación, que busca una salida pacífica y democrática a la crisis política, económica y social que vive Venezuela desde hace años.