El comercio entre Venezuela y Colombia podría alcanzar los 800 millones de dólares (USD) este año, según las proyecciones del Gobierno colombiano. Sin embargo, las sanciones impuestas por Estados Unidos a Caracas dificultan el flujo de pagos y el acceso al crédito entre ambos países.
Así lo afirmó el embajador de Colombia en Venezuela, Milton Rengifo, en una entrevista con Unión Radio. “Vamos a terminar el intercambio en unos 800 millones de dólares. Esa es la proyección que tiene el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo de Colombia”, dijo.
Rengifo explicó que uno de los principales problemas que afectan el comercio binacional es “la ausencia de mecanismos de pago eficientes y rápidos por las sanciones que operan desde Estados Unidos hacia Venezuela”. Añadió que “la ausencia de un Swift hace que no haya financiamiento, ni haya confianza porque hay que pagar por anticipado cualquier operación comercial, no haya crédito y la banca de los dos países se cuida muchísimo”.
El Swift es un sistema internacional de comunicación financiera que permite a los bancos enviar y recibir información sobre transacciones. Sin embargo, debido a las sanciones estadounidenses, muchos bancos se han negado a operar con Venezuela, lo que dificulta el comercio con otros países.
Oportunidades y desafíos para el sector agroindustrial
El embajador colombiano también destacó que Venezuela ha potenciado su sector agroindustrial y que hay un optimismo para aumentar las exportaciones hacia Colombia. “Están haciendo en Venezuela lo que nosotros no hemos podido o querido hacer allá, que es tostar, moler y vender (café). El negocio allá (Colombia) es vender el café en grano, lo tuestan y muelen afuera”, señaló.
El café es uno de los productos más emblemáticos del comercio entre Venezuela y Colombia. Según datos de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, en 2022 se exportaron 14.000 toneladas de café verde a Venezuela, lo que representó un aumento del 75% con respecto al año anterior.
Sin embargo, el sector agroindustrial también enfrenta desafíos para consolidar su presencia en el mercado colombiano. Entre ellos, se encuentran las dificultades logísticas, la falta de divisas, la escasez de insumos y la competencia con otros países productores.
