Un informe de la Cámara Venezolana Americana de Comercio e Industria (Venamcham) publicado este martes reveló que Venezuela incrementó sus exportaciones de petróleo a Estados Unidos en un 122,4% en el primer semestre de 2023, en comparación con el mismo lapso del año pasado.
El petróleo domina el comercio bilateral
Según los datos del USA Trade del Census Bureau de Estados Unidos, Venezuela vendió a su principal socio comercial un total de 1.209 millones de dólares (USD) en productos petroleros entre enero y junio de este año, frente a los USD 987.000 que exportó en el mismo período de 2022.
Estas ventas representaron el 86,58% de las exportaciones totales de Venezuela a Estados Unidos, que sumaron USD 1.396 millones. El resto correspondió a productos no petroleros, entre los que destacaron las preparaciones comestibles de carne, pescado, crustáceos y moluscos (USD 34 millones); las máquinas y aparatos eléctricos (USD 32 millones); los químicos orgánicos (USD 28 millones); los peces y crustáceos (USD 21 millones); así como las perlas naturales, piedras, metales preciosos y manufactura de estas materias (USD 13 millones).
El intercambio comercial entre ambos países alcanzó los USD 2.610 millones en el primer semestre de 2023, lo que significó un aumento de 113%. Venamcham destacó que, después de tres años, la balanza comercial neta mostró una recuperación para Venezuela, con un superávit de USD 183 millones.
Cambio de política en Washington
El aumento de las exportaciones petroleras venezolanas se produjo en medio de una flexibilización de las sanciones impuestas por el Gobierno de Estados Unidos a la Administración de Nicolás Maduro en los últimos años.
El Gobierno de Joe Biden otorgó una licencia en noviembre pasado a la empresa estadounidense Chevron, con sede en California, para ampliar sus operaciones en el país caribeño. En enero, salió el primer cargamento con 500.000 barriles de crudo pesado venezolano hacia su refinería en Mississippi.
Esta medida se enmarcó en un esfuerzo de las autoridades estadounidenses para propiciar el diálogo entre las fuerzas políticas venezolanas, y buscar una solución al conflicto político con un cronograma electoral justo, entre otras prioridades sociales.
