En medio de la pandemia del coronavirus, las autoridades sanitarias han recomendado realizar gran parte de las actividades diarias en espacios abiertos, a pesar que, en ocasiones, la situación puede tornarse difícil.
En las habitaciones con espacios cerrados el aire permanece quieto, lo que genera que los contaminantes y virus se concentren en el lugar.
“La ventilación de los espacios cerrados, como oficinas, autos, casas, escuelas y transporte público, hoy es clave como una manera para controlar la pandemia”, señaló José Luis Jiménez, profesor de Química de la Universidad de Colorado, en declaraciones reseñadas por Infobae.
Por tal motivo, es importante tener en cuenta las recomendaciones para disminuir el riesgo de contagios:
Ventilar varias veces al día
El profesor universitario Klaus Fiedler, dedicado a la investigación en el campo de la higiene y la medicina residencial, aconseja ventilar las habitaciones al menos tres veces al día.
“A menudo se siente el aire viciado solo cuando se produce el contraste, tras llegar de otra habitación”, dijo.
Sobre esto, Jiménez señaló que estar al aire libre, usar tapabocas y mantener el distanciamiento social son algunas de las claves para frenar los contagios por el virus.
Temperatura y humedad
Una medida importante cuando se trata de tener un clima saludable. El aire seco genera que se resequen las mucosas, y dificulta que el cuerpo elimine las partículas de polvo, bacterias y los virus inhalados.
“Como resultado, los agentes patógenos tienen más facilidad para entrar en el cuerpo y la persona se resfría más rápidamente”, afirmó Fiedler.
En este sentido, recomendó a las personas colocar un recipiente con agua o algunas plantas en el interior para garantizar aire fresco en la habitación.
El profesor indicó que lo recomendable es que la humedad de la habitación esté entre 40 y 60%.
Abrir las ventanas
Al abrir las ventas, la humedad dentro del hogar se transporta al exterior, además de producir calor confortable para la salud de la persona.
Para una mejor ventilación, los expertos recomiendan abrir las ventanas tres veces al día, ya que en verano el aire presente en la habitación puede demorar en renovarse.
En caso de que sea invierno, con 3 ó 4 minutos son suficientes.
No obstante, desaconsejan las ventanas oscilobatientes. Esto, porque cuando hace frío en el exterior, la humedad del aire se condensa en la superficie y puede provocar la formación de moho.
En caso de días calurosos, la ventana puede permanecer abierta, pero la ventilación es mínima debido a su pequeña abertura.
