El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, afirmó ele martes que Venezuela no ha mostrado ningún “avance” en materia de democracia y derechos humanos que le permita reintegrarse al Sistema Interamericano de Derechos Humanos, del que se retiró en 2013.
En una conferencia de prensa previa a la 53 Asamblea General de la OEA, Almagro elogió la iniciativa del presidente colombiano, Gustavo Petro, de impulsar el regreso de Venezuela al Sistema Interamericano, que implica el reconocimiento de la jurisdicción de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
“Estamos de acuerdo con todas las propuestas que busquen que Venezuela vuelva a comprometerse con la democracia y con el Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Todos los aportes son extraordinariamente bienvenidos, los apoyamos y los valoramos“, dijo.
Asimismo, Almagro respaldó la idea de “rehacer” la Carta Democrática Interamericana, que establece que todos los países de la región deben promover la democracia. Según Almagro, ese documento debe ser actualizado porque no contempla los retos que supone la tecnología en la actualidad.
“Toda propuesta de buena fe y que aporte para hacer el sistema más fuerte es muy importante”, declaró.
Con las puertas abiertas, pero con requisitos
Sin embargo, Almagro recalcó que para que Venezuela pueda volver al Sistema Interamericano debe ser un “país democrático” y respetar los derechos humanos.
“No hay avances visibles ni en el funcionamiento democrático del país ni en la protección de los derechos humanos, ni en la situación de los presos políticos ni en la Justicia“, aseguró Almagro, quien criticó que en el país suramericano no haya “separación de poderes”.
El secretario general también denunció que Venezuela ha protagonizado “la peor crisis migratoria de la historia” del continente, con siete millones de personas que han huido del país, y subrayó que todas sus instituciones han “colapsado”.
Almagro evita cuestionar a Brasil por Nicaragua
En la conferencia de prensa, Almagro evitó criticar a Brasil por su intento de suavizar una declaración que se está preparando para la Asamblea General de la OEA en contra del Gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua.
El secretario general dijo que tiene “el más profundo respeto por la posición de Brasil”, al tiempo que afirmó que la declaración será “un esfuerzo más de la organización para condenar la falta de democracia en Nicaragua y las violaciones por parte del régimen”.