La Policía de Portugal desplegó maquinaria pesada y perros rastreadores este miércoles, en el segundo día de búsqueda en un remoto embalse de pruebas que vinculen a un sospechoso alemán con la desaparición de la niña británica Madeleine McCann hace 16 años.
Los servicios de emergencia utilizaron un tractor cortacésped teledirigido para despejar lo que parecía ser una nueva zona de búsqueda, a unos cientos de metros de un campamento provisional instalado el martes a orillas del embalse de Arade por la policía portuguesa, con la ayuda de sus homólogos alemanes y británicos, refirió Reuters.
Decenas de agentes centraron su búsqueda en la orilla del embalse y en una colina situada más arriba, y no estaba claro si utilizarían buzos para buscar en el agua.
La búsqueda continúa
McCann tenía tres años en mayo de 2007 cuando desapareció de su habitación en el apartamento en el que se alojaba su familia en el complejo turístico de Praia da Luz, en la costa del Algarve. El embalse se encuentra a unos 50 km tierra adentro.
Citando a una fuente cercana a la investigación, el diario portugués Expresso afirmó que la Oficina Federal de Policía Criminal alemana actuó después de recibir información “muy creíble” del caso.
El fiscal Christian Wolters, de Braunschweig, declaró a la emisora NDR que la información no procedía del sospechoso y que no había “ninguna confesión ni nada parecido”, y que la policía no buscaba necesariamente los restos de McCann en el Arade.
Los fiscales alemanes nombraron el año pasado a Christian Brueckner como sospechoso oficial de la desaparición de McCann. El abusador de niños y traficante de drogas condenado está tras las rejas en Alemania por violar a una mujer de 72 años en la misma zona de la región del Algarve donde McCann desapareció. Ha negado cualquier implicación en la desaparición.
