Representantes legales pidieron este martes, 22 de abril, a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) que ordene la liberación de los expolicías Rolando, Juan y Otoniel Guevara (hermanos), quienes fueron condenados en 2005 en Venezuela por el asesinato del fiscal Danilo Anderson.
La defensa de los hermanos Guevara aseguran que el caso se trató de un montaje con testigos falsos y lleno de irregularidades procesales.
«Solicitamos a esta Corte que condene y sancione al Estado venezolano por las violaciones a los derechos humanos y solicite al Estado la libertad inmediata e incondicional de Rolando, Otoniel y Juan Guevara, e inste al Estado a brindar una reparación integral», declaró Jackeline Sandoval, representante de la Fundación para el Debido Proceso y esposa de Rolando Guevara, durante una audiencia ante la CorteIDH.
Defensa de los Guevara
Rolando y Otoniel Guevara fueron sentenciados a cumplir 27 años de cárcel por el delito de homicidio calificado con premeditación y alevosía, mientras que Juan Guevara cumple una pena de 30 años de prisión por el mismo delito y por porte ilícito de armas.
Sandoval afirmó que los Guevara han sufrido delitos de lesa humanidad, torturas, privación arbitraria de la libertad, y que el proceso penal en su contra se caracterizó por «perturbaciones procesales graves», incluidos «testigos pagados», lo que constituye un «fraude procesal».
Asimismo, la mujer dijo que durante el proceso penal los Guevara fueron objeto de «declaraciones estigmatizantes de altos funcionarios», incluido el entonces presidente Hugo Chávez.
Al momento de la detención, los Guevara ya no trabajaban como policías, relató Sandoval.
La CIDH sobre el caso
Por otra parte, la coordinadora de casos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), María del Pilar Gutiérrez, señaló que en noviembre de 2004 los Guevara fueron detenidos sin que se les mostrara orden judicial y aseguró que fueron sometidos a torturas mientras se les interrogaba por el atentado con bomba que mató al fiscal Danilo Anderson el 18 de noviembre 2004.
La acusación contra el Estado venezolano indica que el proceso penal desconoció el derecho a la defensa y el principio de inocencia, dado que las autoridades dictaron las condenas basándose únicamente en los testimonios de dos personas sin sustentar de forma autónoma y razonada todos los elementos probatorios.
Asimismo, en la audiencia de este martes ante la CorteIDH, declaró como testigo la comunicadora María Angélica Correa. Ella hizo una investigación y afirmó haber descubierto un «engranaje» entre la Fiscalía, jueces, magistrados y la inteligencia militar, para crear un «guión» y contrataron testigos falsos.
De esta forma, «ocultaron a los verdaderos autores intelectuales que se encontraban en altas esferas del poder», afirmó Correa, al recordar que los hermanos Guevara fueron policías de alto nivel antes de la llegada al poder de Hugo Chávez.
Con información de EFE