El presidente de Colombia, Gustavo Petro, afirmó este lunes durante una reunión del Consejo de Ministros que no tiene previsto visitar Estados Unidos, alegando que sospecha que las autoridades de ese país le han revocado su visado.
“Germán Ávila (ministro de Hacienda) está en Estados Unidos. Yo ya no puedo ir porque creo que me quitaron la visa. No tenía necesidad de tener visa, pero bueno. Ya vi al Pato Donald varias veces, entonces me voy a ver otras cosas”, expresó el mandatario colombiano, en una frase que pareció ir acompañada de una indirecta hacia el expresidente estadounidense Donald Trump.
Las declaraciones se produjeron durante la reunión semanal del Ejecutivo, donde además anunció que su próximo destino internacional será China, esta vez en calidad de presidente pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac). El anuncio se dio en un contexto de tensión sostenida con Washington, motivada por diferencias ideológicas y, más recientemente, por el manejo migratorio.
La relación bilateral entre Colombia y Estados Unidos atraviesa un momento complicado, agudizado desde enero pasado cuando se desató una crisis diplomática por la deportación masiva de ciudadanos colombianos desde suelo estadounidense.
Petro también ha sido crítico respecto al tratamiento que han recibido migrantes venezolanos en países como El Salvador, señalando directamente al presidente Nayib Bukele por la expulsión de venezolanos hacia esa nación centroamericana. En un mensaje difundido a través de su cuenta oficial en la red social X (antes Twitter), el mandatario colombiano manifestó: “No, señor Bukele, muy mal. No lo aceptamos, y la Justicia estadounidense no acepta que se criminalice a los hijos de Venezuela, la patria de Bolívar”.
En esa misma línea, el jefe de Estado colombiano exigió respeto y protección para los migrantes, tanto venezolanos como colombianos, en el extranjero. “Entréguennos a los colombianos que tienen en sus cárceles. Dejen ir al pueblo venezolano, porque es un pueblo que clama por su libertad. Los migrantes no son criminales: ésta es una regla básica de la humanidad”, añadió.
Asimismo, defendió que las acciones judiciales no pueden usarse como excusa para discriminar o perseguir a comunidades enteras por los actos de grupos delictivos. “Ninguna persona con mentalidad democrática en Latinoamérica puede aceptar como principio de una república que todo el pueblo venezolano en el exilio sea criminalizado por los crímenes del ‘Tren de Aragua’”, concluyó el mandatario.
Con información de Europa Press.
