El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, anunció este martes que el próximo miércoles enviará una carta dirigida al alto comisionado de las Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos, Volker Türk, con el propósito de exigir la liberación de los ciudadanos venezolanos trasladados por Estados Unidos a una prisión en El Salvador.
Durante su participación en el programa Maduro de repente, transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV), Saab explicó que el documento también busca que la ONU atienda la situación de los migrantes con carácter de «emergencia» en sus instancias dedicadas a la defensa de los derechos humanos.
El fiscal agregó que la solicitud pretende que se ejerzan «presiones por los medios legales, tanto de la ONU como de los países que están en este momento secuestrando» a ciudadanos venezolanos, mencionando específicamente a El Salvador, con el fin de garantizar la «inmediata libertad» de los detenidos.
«¿Cuál es el papel del alto comisionado de los derechos humanos de la ONU, del Consejo general de los Derechos Humanos de la ONU? Abrir un debate, en tiempo real, de esto, convocar de emergencia. Yo hago un llamado a Volker Türk: que convoque de emergencia a los países miembros de esa instancia en la ONU para debatir este caso que no puede permanecer más en silencio», declaró Saab.
Por su parte, el presidente Nicolás Maduro también instó a los magistrados del Poder Judicial de El Salvador a liberar a los venezolanos detenidos, asegurando que «no han cometido ningún delito» en territorio salvadoreño. Los migrantes fueron acusados de presuntamente pertenecer al Tren de Aragua, una organización criminal surgida en una cárcel venezolana y catalogada como grupo terrorista por Estados Unidos.
«Venezuela pone los aviones para irlos a buscar, de inmediato, apenas sean liberados», afirmó Maduro.
El pasado viernes, la Cancillería venezolana informó que Maduro sostuvo conversaciones con el secretario general de la ONU, António Guterres, el miércoles, y con Volker Türk, el viernes, con el objetivo de gestionar «la liberación inmediata y sin condiciones de los 238 compatriotas injustamente detenidos» en El Salvador. Según el mandatario, estas personas fueron encarceladas sin un debido proceso judicial ni acceso a defensa legal.
El Ministerio de Exteriores señaló que tanto Guterres como Türk manifestaron su «compromiso de activar todos los mecanismos disponibles para restablecer, lo antes posible, los derechos flagrantemente violados de las y los migrantes venezolanos».
Mientras tanto, el pasado miércoles, la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, visitó la prisión de máxima seguridad en El Salvador donde se encuentran recluidos los migrantes venezolanos. Estas personas fueron expulsadas bajo la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, a pesar de una orden judicial que prohibía su deportación.
En el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), una megacárcel construida como parte de la política de seguridad del Gobierno de Nayib Bukele en el marco del régimen de excepción, Noem expresó su gratitud hacia El Salvador y su presidente por «su asociación con los Estados Unidos» para recibir a «terroristas» y mantenerlos encarcelados.
Hasta el momento, las autoridades salvadoreñas no han aclarado bajo qué marco legal estas personas fueron detenidas en el Cecot, dado que la Asamblea Legislativa de El Salvador no ha aprobado ninguna resolución que lo autorice y los migrantes no cuentan con órdenes de captura ni procesos judiciales abiertos en el país centroamericano.
Con información de SWI swissinfo.ch / EFE.
