El gobierno de Donald Trump pagará a El Salvador USD 6 millones para encarcelar por un año a 300 pandilleros del ‘Tren de Aragua’, en lo que refiere a uno de los primeros casos en que la nación centroamericana recibe a migrantes desde EE. UU.
El acuerdo surge tras las conversaciones entre el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, y el secretario de Estado, Marco Rubio, sobre el alojamiento de migrantes en la infame prisión salvadoreña. El gobierno de Bukele ha arrestado a más de 84.000 personas, en ocasiones sin el debido proceso, desde 2022 como parte de su ofensiva contra la violencia de pandillas en el pequeño país.
Los memorandos que detallan la transferencia no revelaron cómo la administración Trump identificó a las aproximadamente 300 personas como miembros del Tren de Aragua, una pandilla que Trump destacó repetidamente en la campaña y declaró como una organización terrorista.
“La República de El Salvador confirma que albergará a estos individuos durante un (1) año, en espera de la decisión de Estados Unidos sobre su disposición a largo plazo”, escribió el Ministerio de Relaciones Exteriores de El Salvador en un memorando obtenido por Associated Press.
El país centroamericano y la administración Trump llegaron a un acuerdo el mes pasado para albergar a migrantes detenidos en Estados Unidos. La administración Trump sostuvo que El Salvador podría incluso albergar a ciudadanos estadounidenses, aunque Estados Unidos no puede deportarlos a otro país.
Rubio y Bukele discutieron los detalles del nuevo traslado, que incluye un costo de aproximadamente USD 20,000 para alojar a cada preso durante el año. Un documento del Departamento de Estado también sugiere que podría destinar USD 15 millones a El Salvador para albergar a más miembros de la pandilla.
El memorando salvadoreño también confirmó que el país recibiría a dos hombres que, según dijo, eran miembros de la pandilla MS-13, una organización que inicialmente estaba compuesta por migrantes salvadoreños en Estados Unidos y que había ganado una presencia cada vez mayor en El Salvador antes de la represión de Bukele.