Atlantic Council: Sanciones de “máxima presión” contra Venezuela benefician a adversarios de USA y perjudican a venezolanos

Foto: Pdvsa.

El think tank estadounidense Atlantic Council, a través de su subdirector William Tobin, publicó un análisis crítico sobre la estrategia de «máxima presión» aplicada por Estados Unidos entre 2018 y 2022 contra el Gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela. Según Tobin, este plan «no sirvió a los intereses estadounidenses» y las sanciones económicas impuestas a Venezuela obligaron a las petroleras occidentales a retirarse del país caribeño, beneficiando principalmente a adversarios de la potencia norteamericana como China, Irán y Rusia.

Durante ese periodo, la producción de petróleo de Venezuela fue redirigida a China a precios descontados, Irán suministró la diluida necesaria para la producción de petróleo, y los inversionistas rusos se volvieron más críticos en medio de la escasez de inversión occidental. Mientras tanto, la represión y las «violaciones de derechos humanos» continuaron, dificultando una «transición democrática».

«Los venezolanos sufrieron, los adversarios estadounidenses ampliaron su influencia y Maduro se mantuvo», señaló Tobin.

El análisis destaca que, en contraste, el sistema actual de emisión de licencias específicas para que los productores de petróleo occidentales operen en Venezuela ha arrojado resultados superiores. Entre los beneficios de esta política se encuentran:

  1. Las exportaciones de petróleo venezolano han sido desviadas a naciones amigas de Estados Unidos.
  2. El Tesoro ha aumentado la visibilidad en todas las transacciones relacionadas con el petróleo, disminuyendo el envío clandestino de petróleo a través de flotas de petroleros en la sombra operadas por el establishment de defensa chino, Irán o Pdvsa.
  3. La indemnización al Estado venezolano se limita a los impuestos y regalías exigidos por la ley local.
  4. El sistema ha permitido el retorno o reempleo de ingenieros y técnicos cualificados para restablecer la producción de la infraestructura de campos petrolíferos degradados.

Tobin sugiere que la administración entrante de Estados Unidos debería priorizar infligir más daño al gobierno y a sus facilitadores que a los intereses del pueblo venezolano o de Estados Unidos. Para ello, las sanciones deben vincularse a objetivos claros. «Una reabastecida de la máxima presión cedería influencia a China, Rusia e Irán, mientras hace poco para aflojar el control del régimen sobre el poder», advirtió.

En cambio, Tobin recomienda mantener y ampliar el sistema existente de licencias específicas. Para «castigar» a Maduro, la administración estadounidense debería seguir atacando a individuos que permiten su gobierno «ilegítimo», sumándose a las 180 personas ya sancionadas por el Tesoro.

«Una política de sanciones selectivas, no la máxima presión, es la única manera de asegurar que las acciones estadounidenses para enfrentar al régimen de Maduro impongan su efecto deseado, y no jueguen en manos de Pekín, Moscú o Teherán», concluyó.

Con información de Atlantic Council.

Previous Article
Qatar Airways

Qatar Airways anuncia un vuelo semanal entre Doha y Caracas

Next Article
migrantes deportados

56 mexicanos son los primeros deportados de USA tras orden de Trump

Related Posts