Paraguay respondió rápidamente al gobierno de Nicolás Maduro, quien la tarde de este 6 de enero anunció de manera unilateral la ruptura de relaciones diplomáticas con Asunción, a raíz de que el mandatario Santiago Peña reconoció a Edmundo González como presidente electo de Venezuela.
En un comunicado emitido por el gobierno venezolano se acusaba a Peña de violentar el derecho internacional y el principio de no intervención, así como de insistir en una supuesta «estrategia fracasada» al estilo de «Guaidó».
En el texto, divulgado por el canciller Yván Gil se informó sobre la decisión de romper las relaciones diplomáticas, a lo que el gobierno paraguayo respondió casi de inmediato, reiterando que «reconoce al señor Edmundo González como presidente electo de la República Bolivariana de Venezuela».
«En tal carácter con (tiene) el derecho de asumir la dirección de su nación el próximo 10 de enero, conforme con la voluntad soberana del pueblo venezolano expresada el 28 de julio pasado», indica el comunicado de la Presidencia de Paraguay.
Asimismo, «ratifica el firme y contundente apoyo del Paraguay al derecho del pueblo venezolano a vivir en democracia, dentro de un Estado de Derecho, con respecto absoluto a sus libertades y garantías fundamentales».
Finalmente, el gobierno de Asunción «exige» al embajador venezolano Ricardo Capella y a todo el personal de la delegación venezolana en Paraguay que abandone ese país en un plazo máximo de 48 horas.