El domingo, el presidente Nicolás Maduro solicitó al sector de la oposición que considera «tóxico» que detenga sus «conspiraciones» contra Venezuela.
Maduro instó a aquellos que «no pueden dejar de odiar» a «no hacer daño al país y a no conspirar en su contra». Además, enfatizó: «Si no aportas algo positivo para Venezuela, no le hagas daño».
Dirigiéndose a quienes considera «tóxicos», el mandatario declaró: «Nosotros tenemos el corazón rojo rojito de amor por Venezuela. ¿Quieren ver algo rojo? Vean nuestro corazón hinchado de patriotismo«.
El jefe de Estado subrayó que Venezuela es un país de alegría, soberanía y libertad. «Siempre digo a la gente que odia, a los que quieren robarse Venezuela: No han podido ni podrán jamás«, expresó, al tiempo que añadió: «Este proyecto no es de un solo hombre, es el pueblo; no es un hombre, es un pueblo».
Finalmente, el mandatario reafirmó el «derecho a la paz». «Esa es nuestra gran victoria y nadie nos arrebatará la paz», concluyó.