El Gobierno de Venezuela rechazó este martes el comunicado del G7, donde piden la libertad para los detenidos “injustamente” en el país caribeño, al tiempo que informó que, con base a ese pronunciamiento, procederá a revisar sus relaciones con cada una de esas naciones.
En una misiva, la Cancillería condenó que los Estados miembros del G7 pretendan creerse “árbitros” de la democracia global. Al mismo tiempo, acusa a ese grupo de promover la ideología “nazi”.
Nuevamente, el Gobierno aludió al hecho de que se pretende imponer un “Guaidó 2.0”, en referencia a Edmundo González.
A continuación, el texto íntegro:
La República Bolivariana de Venezuela rechaza categóricamente el absurdo pronunciamiento, sobre el proceso electoral y político venezolano, emitido por el G7, un grupo de potencias que insiste en creerse árbitro de la democracia global mientras encubre sus propios fracasos políticos, económicos y morales, apoyando genocidios y estimulando la propagación de la ideología nazi y fascista en Europa y el mundo.
Resulta particularmente irónico que estos mismos países, que hicieron el más estruendoso de los ridículos en 2019 al reconocer a un impostor como “presidente interino”, ahora pretendan dar lecciones sobre voluntad popular y procesos electorales.
Intentan, desde el complejo colonialista e imperialista, preparar el terreno para desconocer las instituciones y las decisiones del pueblo venezolano con la fantasía de un Guaidó 2.0 que nuevamente se estrellará contra la dignidad de los herederos de Simón Bolívar.
Advertimos a los países del G7 que esta actitud injerencista y arrogante no quedará sin respuesta. Venezuela procederá a revisar de manera integral sus relaciones con cada uno de los gobiernos que integran este grupo, porque el respeto a la soberanía nacional no es negociable.
La historia ya ha demostrado que el pueblo Bolivariano no aceptará más tutelajes. Venezuela es libre, y seguirá siéndolo, por mucho que les duela a quienes no han superado sus complejos imperiales.