El Gobierno venezolano necesita un “alivio rápido de sanciones” estadounidenses para reestructurar la deuda de USD 150.000 millones que tiene el país caribeño.
De acuerdo a Bloomberg, si Nicolás Maduro ganas los comicios del fin de semana, tendrá que hacer frente a la situación económica de Venezuela, así como también convencer a la comunidad internacional de la legitimidad de su victoria.
El Gobierno venezolano ha reducido los subsidios, ha creado propuestas para los inversores y ha firmado acuerdos con petroleras de diversos países para mejorar la situación económica en Venezuela.
Sin embargo, para que pueda existir un alivio de las sanciones al país caribeño, EEUU deberá percibir que las elecciones del domingo próximo son limpias y justas.
Phil Gunson, analista del International Crisis Group en Caracas, manifestó que “es muy difícil imaginar en este momento que habrá un resultado que satisfaga la necesidad de Maduro de reconocimiento internacional”.
Si no hay esa “aprobación” de la nación norteamericana, Venezuela posiblemente siga estando bloqueada en los mercados financieros internacionales, lo que significa que deberá seguir buscando la forma de cómo reestructurar la deuda en mora que tiene el país, así como también ver cómo reunirá el capital que necesita para reavivar la industria petrolera.
En ese sentido, Francisco Monaldi, director de política energética latinoamericana en el Instituto Baker de la Universidad Rice, apuntó que “el problema para Maduro es que todas las cosas han ido en la dirección equivocada”.
Destacó, además, que la producción petrolera de Venezuela podría llegar a 1 millón de barriles diarios en 2025 si no hay nuevas inversiones.
Por su parte, Francisco Rodríguez, economista de la Universidad de Denver, añadió que Nicolás Maduro podría tener la disposición de salir adelante “a duras penas”.