Gilberto Pinto, gobernador del estado Sucre, ofreció un balance sobre la situación en la entidad tras el paso del huracán Beryl, lo que dejó como resultado más de 31.000 damnificados.
Según el reporte oficial, además hubo seis personas fallecidas. Asimismo, dos más siguen desaparecidas en Cumanacoa, el epicentro del impacto del fenómeno de la naturaleza.
El desbordamiento del río Manzanares fue el factor clave en los desenlaces fatales al incrementar la potencia del cauce del agua. Esto arrastró todo tipo de escombros y la caída de infraestructuras, en su mayoría viviendas habitadas.
Un total de 10.387 familias resultaron afectadas en Cumanacoa, municipio Montes del estado Sucre, tras el paso del huracán.
De acuerdo a Pinto, 7.990 viviendas sufrieron daños y de ese total, 277 tuvieron pérdidas totales. Asimismo, 850 presentaron daños medianos y otras 682 deterioro leve.
En cuanto al impacto del comercio en la entidad, la autoridad regional precisó que al menos 230 negocios fueron afectados, así como dos áreas industriales y cerca de 850 hectáreas, reseñó Radio Fe y Alegría.
Asimismo, Pinto acoto que dos centros de salud y 10 escuelas sufrieron daños de infraestructura.
