Más de 30.000 menores de edad cruzaron la selva del Darién en el primer cuatrimestre del 2024, lo que significa un 40% más que en el mismo periodo de 2023, informó la Unicef este miércoles.
En vista de ello, el organismo infantil de la ONU alertó que la migración de niños por ese pareja se encamina a un récord sin precedentes este año.
“La migración de niños, niñas y adolescentes a través de la selva del Darién se ha convertido en una crisis prolongada. Con base en las tendencias observadas en los primeros cuatro meses y el contexto regional, se calcula que en 2024 podrían cruzar la selva 800.000 personas, entre ellas 160.000 personas menores de 18 años, y es probable que muchas necesiten asistencia humanitaria”, afirmó Unicef mediante un comunicado.
El incremento en los primeros cuatro meses “hace que esta ruta vaya rumbo a registrar un récord de migración infantil por quinto año consecutivo”.
En ese sentido, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, en inglés) detalló que de los 30.000 menores en transito, casi 2.000 estaban separados o no viajaban junto a sus familias.
“Las cifras de niños, niñas y adolescentes no acompañados y separados se han triplicado respecto a este mismo período de 2023. El número de personas menores de 18 años en tránsito también aumenta a un ritmo cinco veces mayor que el de personas adultas”, dijo el brazo de la ONU, reseñó EFE.
Ted Chaiban, director ejecutivo adjunto de Unicef, precisó que el Darién no es “un lugar para los niños”. “Muchos niños, niñas y adolescentes han muerto en este arduo y peligroso viaje”, advirtió.
“Hay mujeres que dan a luz en el camino y traen al mundo nuevas vidas en las circunstancias más complicadas. Muchas de las personas que sobreviven al viaje llegan enfermas, hambrientas y deshidratadas, muchas veces con heridas o infecciones y necesitan ayuda urgentemente”, sumó.
Chaiban subrayó que los niños, niñas y adolescentes representan una quinta parte de quienes hacen este trayecto. “La presencia y la respuesta de Unicef son más importantes que nunca. Es fundamental que dispongamos de financiamiento adecuado, que nos permita estar listos para prestar ayuda a estos niños y niñas, sea cual sea su país de origen o destino”, resolvió.
Este año, Unicef solicitó USD 7,64 millones para atender las necesidades urgentes del número cada vez mayor de niños, niñas y familias que transitan por Panamá. No obstante, en la actualidad, solo se ha recibido un 10 % de tales fondos, según el ente.
Unicef acotó además que el personal del organismo apoya a la niñez en tránsito en Darién y en Panamá desde 2018. En ese, año solo 522 niños, niñas y adolescentes cruzaron la selva tropical.
“Gracias al apoyo financiero del Gobierno de los Estados Unidos y de la Unión Europea, y a fondos propios, Unicef presta servicios en materia de agua, saneamiento e higiene (Wash), protección infantil, gestión de casos, salud materno infantil y violencia de género en puntos críticos situados a lo largo de esta ruta migratoria. Las acciones también incluyen la asistencia a diez comunidades de acogida o impactadas por la migración”, puntualizó el organismo.