La refinería Cardón, la segunda más grande de Venezuela, suspendió sus operaciones desde mediados de semana debido a una avería en la unidad de craqueo catalítico, según reporta Reuters citando personas no identificadas familiarizadas con la situación.
La red de refinación de Venezuela tiene una capacidad de procesar 1,3 millones de barriles diarios (bpd), pero sufre frecuentes problemas de producción. Los críticos de la empresa estatal Pdvsa le atribuyen una falta de inversión y una mala gestión, mientras que la compañía dice que saboteadores causan daños a sus refinerías.
¿Qué es el craqueo catalítico?
El craqueo catalítico es un proceso de conversión que se utiliza en las refinerías de petróleo para transformar las fracciones de hidrocarburos de alto punto de ebullición y alto peso molecular del petróleo crudo en productos más comerciales, como la gasolina y los gases olefínicos.
El craqueo catalítico se realiza en una planta llamada unidad de craqueo catalítico fluido (FCC, por sus siglas en inglés), que pone en contacto el petróleo con un catalizador caliente y pulverizado, que rompe las moléculas largas en moléculas más cortas, que se recogen como vapor.
¿Qué consecuencias tiene la paralización?
Las paralizaciones en la red de refinación provocan escasez frecuente de combustible en el país sudamericano.
“La planta se averió por un compresor que falló”, dijo una de las fuentes a la referida agencia de noticias, agregando que la unidad “tenía un daño considerable”.
Cardón, que forma parte del Centro de Refinación Paraguaná (CRP) en el noroeste de Venezuela, junto con la refinería Amuay, puede procesar hasta 310.000 bpd.
La refinería reinició el viernes una unidad de destilación después de una falla, mientras que una segunda unidad sigue paralizada.
La unidad de craqueo catalítico de Amuay, la mayor refinería de Venezuela, está paralizada por reparaciones desde marzo, lo que afecta a la producción de gasolina.
Pdvsa ha intentado en los últimos meses aumentar las operaciones de refinación, sin éxito, obligando a los usuarios a esperar en largas colas para surtir sus vehículos con gasolina, especialmente fuera de la capital Caracas.