El Museo de Coral Gables, una ciudad cercana a Miami (Florida), rinde tributo a dos de los artistas venezolanos más influyentes del siglo XX, Jesús Rafael Soto y Carlos Cruz-Diez, con una muestra que conmemora los cien años de su nacimiento.
Ambos creadores, fallecidos en París, fueron pioneros del arte óptico y el arte cinético, y compartieron una trayectoria con muchos puntos en común.
La exposición Maestros que cambiaron la ciudad, que se inaugura este viernes para el público, ofrece una selección de obras emblemáticas de los dos maestros, que nacieron en Venezuela en 1923 y murieron en la capital francesa, Soto en 2005 y Cruz-Diez en 2019.
La ilusión del movimiento
Las veinte piezas que se exhiben, procedentes de colecciones privadas y de galerías de arte, invitan a los visitantes a experimentar el movimiento, la luz, el color y las ilusiones ópticas que caracterizan el arte cinético, un movimiento artístico del siglo XX que se basa en la sensación de movimiento que producen las obras o en el movimiento real de las mismas.
Entre las obras destacadas se encuentra un penetrable de Soto, una de sus esculturas más características, realizada con una estructura metálica de la que cuelgan filamentos plásticos que se mueven cuando alguien entra en el espacio. Se trata de Penetrable azul de Valencia, una obra de 1999 que luego fue reproducida en una edición única.
Otra pieza icónica es Transchromie Mecanique A de Cruz-Diez, creada originalmente en 1965 y también reproducida años después en edición limitada. Consiste en una instalación formada por cilindros de plástico de colores vivos, una estructura metálica y un motor giratorio que genera efectos cromáticos.
Un legado innovador
Con esta muestra, el Museo de Coral Gables se suma a las celebraciones internacionales por el centenario de estos dos reconocidos artistas de talla internacional que “redefinieron la relación entre el arte y la arquitectura, así como la experiencia artística en el espacio público”.
“La exposición transmite la capacidad de estos artistas para crear entornos inmersivos que desafían nuestra percepción y nos invitan a interactuar con las piezas de una manera única“, señaló a EFE la curadora Yuni Villalonga, quien resaltó que Soto y Cruz-Diez experimentaron con la idea de que las formas y el color son siempre “cambiantes” y la interacción con el espectador cambia la obra de arte.
Elvis Fuentes, director del Museo de Coral Gables, destacó que las contribuciones principales de Soto y Cruz-Diez radican en “la desmaterialización de la obra de arte y la expansión de la experiencia del arte más allá de la mera contemplación”.
La exposición, que estará abierta hasta el 22 de octubre próximo, se complementa con paneles educativos y videos documentales que brindan una comprensión más profunda del legado innovador de Soto y Cruz-Diez y su continua influencia en el arte contemporáneo.
