El Gobierno de Estados Unidos expresó su preocupación ante las informaciones que apuntan a una posible detención del dirigente opositor venezolano Juan Guaidó. Aunque no quiso valorar su “veracidad”, dejó claro que la Administración del presidente Joe Biden se reserva el derecho de endurecer las sanciones si no avanza el proceso de diálogo y aumenta la represión en Venezuela.
Así, un portavoz del Departamento de Estado norteamericano señaló a Europa Press que condenan “la represión constante y generalizada de activistas y figuras de la oposición venezolanas”. Esto se produce después de que Guaidó haya alertado en los últimos días sobre un supuesto plan del chavismo para detenerlo.
Washington fue claro en su postura: “revisará y ajustará” su régimen de sanciones si el presidente Nicolás Maduro “no negocia de buena fe, no cumple sus compromisos o incrementa la represión de activistas políticos”, según aseveró este funcionario.
Guaidó dijo a inicios de este mes que el Gobierno venezolano lo amenazó con ordenar su captura. Afirmó que recibió la información de “tres fuentes distintas” y apuntó que otras tres personas ligadas a la oposición podrían ser detenidas también.