La Unión Europea (UE) instó el jueves a la comunidad internacional a mantener el apoyo a los migrantes venezolanos, quienes en los últimos años han huido de la crisis política y económica del país.
Dicha ayuda se requiere cuando la ya complicada situación se ve agravada por las consecuencias de la pandemia y los efectos de la guerra de Rusia en Ucrania.
“Es bueno que nos movilicemos, que continuemos dejando muy claro que las personas en esta crisis no deben ser olvidadas”, afirmó el director general adjunto de la Dirección General de Protección Civil y Ayuda Humanitaria de la Comisión Europea, Michael Köhler, durante la cuarta conferencia internacional de solidaridad con los migrantes y refugiados venezolanos y las comunidades que los acogen.
La reunión cuenta con la colaboración con la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela (R4V).
“Por desgracia la situación se ha vuelto más complicada”, dijo Köhler. Los inconvenientes, explicó, guardan relación con las consecuencias de la pandemia de covid-19, además de la subida de los precios de los alimentos, los fertilizantes y la energía a causa de la guerra de agresión rusa en Ucrania.
“Lo mínimo que puedo prometer es que queremos seguir comprometidos. La UE quiere seguir comprometida con el apoyo a los migrantes y refugiados de Venezuela y apoyando a las comunidades y países de acogida“, dijo el responsable comunitario. Esto contempla movilizar apoyo y financiación humanitaria.
La subsecretaria de Estado de la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado norteamericano, Julieta Valls Noyes, aseguró que el compromiso de su país con el apoyo de los venezolanos “permanece inquebrantable” en tiempos de “crecientes necesidades y recursos finitos”.
Por su parte, el representante especial conjunto de Acnur y la OIM para los refugiados y migrantes de Venezuela, Eduardo Stein, destacó la regularización y la integración socioeconómica de los desplazados como las dos líneas principales en las que trabajan las comunidades de acogida.
Asimismo, el viceministro de Asuntos Exteriores peruano, Ignacio Higueras Hare, explicó que el 70 % de los 1,6 millones de refugiados venezolanos llegados a su país carece del beneficio de la seguridad social. El año pasado había sólo 124.000 personas inscritas en el sistema nacional de salud.
Higuera destacó el gran esfuerzo de Perú al regularizar al 40 % de los refugiados venezolanos, aunque todavía hay trabajo por hacer en ese sentido.