El Gobierno de Venezuela rechazó “contundentemente” este jueves la extensión del decreto de Estados Unidos de “emergencia nacional” sobre Venezuela instando al Ejecutivo de la nación norteamericana a desistir de esta “absurda política llena de soberbia y condenada al fracaso”.
La Administración de Nicolás Maduro aseguró que, con la más reciente extensión de la Orden Ejecutiva 13692 de 2015, el Gobierno estadounidense continúa con “una política de agresión ilegal” contra el país sudamericano. La Casa Blanca justificó la extensión del decreto señalando que las circunstancias en Venezuela, que sufre una “erosión de los derechos humanos”, representan una “amenaza inusual y extraordinaria” para la seguridad nacional de Estados Unidos.
En un comunicado, la Cancillería venezolana condenó tal afirmación de Estados Unidos, esgrimiendo que “ha sido” Venezuela quien “ha tenido que enfrentar una multiplicidad de amenazas, chantajes, agresiones y ataques”.
El Gobierno de Maduro también acusó a la Casa Blanca de “autoritarismo, crueldad y mentira” y calificó la extensión de la política como “errática”. Expresó que “ninguna agresión, por grande que sea, doblegará la voluntad democrática” de Venezuela, y abogó porque Estados Unidos opte “por una política civilizada” basada en la diplomacia y el respeto mutuo.
