Las autoridades de Rusia y China vetaron este martes una resolución de Estados Unidos que pedía al Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) pronunciarse sobre los ensayos balísticos de Corea del Norte por considerar que se trata de una agenda política “viciada” respecto a la península de Corea.
Anna Evstigneeva, la número dos de la representación de Rusia ante la ONU, señaló que Moscú “se opone a cualquier actividad militar que suponga una amenaza para la seguridad de la península y los estados del noreste de Asia”, tal y como recoge un comunicado.
“Vemos nuevamente este círculo vicioso en el contexto norcoreano. Estados Unidos y sus aliados llevan a cabo maniobras militares a gran escala en la región. Corea del Norte, como es lógico, contesta, y nos reunimos aquí para abordar el asunto. La cosa es que, con cada nuevo ciclo, las posiciones se vuelven cada vez más peligrosas para la paz y la seguridad”, sostuvo.
Para ella, la razón de todo esto “es obvia”. “Washington desea forzar a Pionyang al desarme unilateral mediante sanciones y presión. Estados Unidos, Corea del Sur y Japón siguen realizando maniobras militares en la zona en el marco de un nuevo concepto de disuasión”, aseveró.
“En la anterior reunión del Consejo de Seguridad sobre este asunto también abordamos los ejercicios de Estados Unidos y los aliados a nivel regional. (…). Es obvio que los lanzamientos de misiles de Corea del Norte son una consecuencia de la actividad militar de Estados Unidos cerca del país”, sostuvo.
En este sentido, incidió en la importancia de “no aislar estas cuestiones del resto de asuntos a nivel mundial” y señaló que “no se puede pasar por alto la doctrina unilateral en materia de seguridad de Washington”.
La tensión “no es algo que China desee”
Por su parte, el representante de China ante la ONU, Zhang Jun, lamentó la “creciente espiral de tensión” en torno a la península de Corea y expresó su preocupación al respecto, si bien apuntó que Pekín “espera que las partes implicadas avancen hacia un entendimiento” en la zona.
“El aumento de la tensión no sirve a los intereses de nadie y no es algo que China desee. El mundo está hoy lleno de incertidumbres y la península de Corea no puede permitirse más daños ni un mayor deterioro de la situación“, explicó antes de afirmar que “las partes deben centrarse en la paz y la estabilidad”.
Asimismo, afirmó que “todas las partes deben mantener la calma y actuar con cautela para no provocar un aumento de la tensión”, según informó el Gobierno chino en un comunicado.
“Tenemos que corregir el curso de los acontecimientos y restaurar el diálogo”, insistió antes de pedir a Estados Unidos que “muestre sinceridad y ponga sobre la mesa propuestas realistas” que permitan “responder a las legítimas preocupaciones de Corea del Norte”.
Zhang destacó la importancia de que el Consejo de Seguridad “desempeñe un papel constructivo que (…) contribuya a reducir la tensión en la península en vez de crear obstáculos”.