Finlandia informó este viernes que para marzo de 2023 comenzarán las obras de una valla de prueba de tres kilómetros en la frontera este con Rusia, de cara a la que se prevé construir a lo largo de todo el espacio que limita entre ambos países para evitar la inmigración ilegal.
El Servicio Fronterizo de Finlandia precisó que la construcción comenzará en la localidad de Pelkola en la ciudad de Imatra, cerca de un puesto de control. La valla comenzará a orillas del río Wuoxi y se construirá en dirección norte.
Las autoridades fronterizas señalaron que se instalará videovigilancia alrededor de todo el perímetro. Se estima que la valla definitiva tenga entre 130 y 260 kilómetros. Su construcción está valorada en “cientos de millones” de euros y se prolongará durante los próximos tres o cuatro años, informó la cadena Yle.
El Gobierno de la socialdemócrata Sanna Marin justificó la necesidad de levantar esta cerca para controlar la posibilidad de que aumenten los cruces ilegales a través de una frontera de unos 1.340 kilómetros, la más extensa entre todos los países de la Unión Europea (UE).
A finales de septiembre, Finlandia aprobó el cierre de las fronteras a los turistas rusos, en plena escalada migratoria derivada de la movilización parcial para invadir Ucrania anunciada días antes por el presidente Vladimir Putin, sumándose así a las restricciones en ese sentido que ya adoptaron antes los países bálticos y Polonia.