La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de Colombia otorgó la amnistía Rodrigo Granda, alias Ricardo Téllez, conocido como el canciller de las Farc, al no encontrar pruebas que demostraran que habría incurrido en un delito de rebelión, por lo que solicitó que le sean retirados sus antecedentes por estos hechos.
La JEP sostuvo que no se pudo establecer que Granda cometiera el delito de rebelión del que fue acusado en 2006, una imputación recurrente de las autoridades colombianas contra quienes forman parte de grupos armados irregulares.
Este tribunal, surgido tras los acuerdos de paz de 2016 en los que participó el propio Granda, señaló que aunque la Fiscalía tiene varias investigaciones sobre su participación en varios delitos, entre ellos homicidio, todas están en etapa de instrucción por lo que no hay suficientes pruebas que le inculpen.
No obstante, la JEP precisó que continúan estas investigaciones. En total son 40 los casos abiertos que tiene Granda, quien deberá jurar una declaración de compromiso y seguir compareciendo ante este tribunal.
El nombre de Granda se hizo más conocido a nivel mundial cuando su detención en 2004 provocó una pequeña crisis diplomática entre la Venezuela de Hugo Chaves y la Colombia de Álvaro Uribe, después de una operación extraoficial de las autoridades colombianas en territorio venezolano.
En octubre de 2021 fue detenido en México cuando iba a participar en un congreso de fuerzas políticas de la extrema izquierda a petición de Paraguay, que activó una circular roja de Interpol por su presunta relación en el secuestro y asesinato en 2005 de Cecilia Cubas Gusinky, hija del expresidente paraguayo Raúl Cubas. Finalmente fue devuelto a Colombia.
