Las autoridades de Ucrania denunciaron este miércoles una nueva oleada de ataques aéreos lanzados por las Fuerzas Armadas rusas contra varios puntos de la geografía ucraniana, incluida la capital, Kiev.
La Fuerza Aérea ucraniana confirmó que, por el momento, ha logrado derribar diez drones de fabricación iraní, así como cuatro de los seis misiles crucero lanzados por Rusia. Kiev denunció que la mayoría de los drones han sido enviados desde territorio bielorruso.
Según detallaron las autoridades locales, la defensa aérea ha logrado derribar “varios misiles rusos”, si bien incidió en que por el momento no se dan las condiciones de cancelar las alertas y recomendaron a la población resguardarse en refugios.
Por su parte, el gobernador de la región homónima, Oleksei Kuleba, extendió esta recomendación al resto de la zona, alegando que los sistemas de defensa aérea están operando en el territorio, según recoge la agencia Ukrinform.
Junto a la capital, otro de los puntos más candentes es la región de Vinnitsia, en el centro-este de Ucrania, donde Rusia fijó su objetivo en las instalaciones energéticas, una estrategia recurrente, más aún en las últimas ofensivas rusas.
Asimismo, las autoridades de la región de Chernígov, en el norte, confirmaron la explosión de un vehículo aéreo no tripulado lanzado por Rusia pero supuestamente suministrado por Irán. Este asunto ha levantado las críticas de Kiev en las últimas semanas, pues acusa a Teherán de estar colaborando con Moscú.
Esta nueva oleada de ataques rusos se confirma apenas unas horas después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, haya decretado la ley marcial en las regiones de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia, los cuatro territorios ucranianos anexados a Rusia tras los referéndums fraudulentos celebrados en septiembre.
