El Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprobó este viernes la renovación por dos años de la misión que investiga crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
El proyecto indicó que “es valioso renovar el mandato de la misión para contribuir a la rendición de cuentas. Es una renovación técnica de mandato“, explicaron las naciones que presentaron la resolución.
La resolución recibió 19 votos a favor, 5 en contra y 23 abstenciones.
De los países de América Latina que tienen voto en el Consejo, Brasil y Paraguay acompañaron el proyecto; mientras que Argentina, México y Honduras se abstuvieron; y Bolivia, Cuba y Venezuela lo hicieron en contra.
Durante el debate previo a la votación hubo un momento de tensión en la sala, luego de que la embajadora de Estados Unidos fuera interrumpida por su par venezolano, quien exigió que su país “sea respetado”.
Por su parte, los embajadores de Bolivia y Cuba rechazaron cualquier intento de renovar la misión, mientras que el representante de China tildó de “injerencista” el trabajo de la misión independiente de la ONU.
El embajador de la Administración de Nicolás Maduro rechazó el proyecto y lo definió como “hostil”, además criticó a los medios de comunicación, a quienes acusó de llevar “semanas esperando la aprobación”.
¿Qué dice el informe?
La Misión Internacional Independiente de Investigación de la ONU sobre Venezuela presentó el pasado mes de septiembre su tercer informe anual, el cual se centró en los crímenes de lesa humanidad cometidos por los servicios de inteligencia que responden a Nicolás Maduro.
Los investigadores concluyeron que las torturas perpetradas por la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) y el Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) no fueron actos aislados, sino parte de una “maquinaria” y “un plan del gobierno para reprimir a la disidencia” que fue “orquestado” por Maduro.
El reporte concluyó que los organismos de inteligencia del Estado civil y militar de Venezuela funcionan como estructuras coordinadas “en la ejecución de un plan orquestado en los niveles más altos del gobierno para reprimir la disidencia mediante crímenes de lesa humanidad“.
Además, los investigadores también detallaron las funciones y contribuciones de varios funcionarios en los distintos niveles de las cadenas de mando dentro de los organismos de inteligencia.
