El Departamento del Tesoro de Estados Unidos autorizó una serie de excepciones a las sanciones en vigor contra Irán para promover “la libertad de Internet” en Irán, en plena ola de protestas por la muerte de una mujer detenida por la Policía de la Moral iraní por llevar mal el velo.
El fallecimiento de Mahsa Amini desató una ola de movilizaciones y, ante el bloqueo de la red en Irán por parte de las autoridades del país persa para restringir la libertad de expresión y convocatorias, Washington quiso tener un gesto con el que quiere que las compañías que faciliten el desarrollo de Internet queden exentas del amplio abanico de sanciones.
El secretario adjunto del Tesoro norteamericano, Wally Adeyemo, subrayó que el Gobierno de Joe Biden “redobla su apoyo al libre flujo de información” en un momento en que “valientes iraníes” toman las calles para protestar por la muerte de Amini. “Con estos cambios, ayudamos a la población iraní a equiparse mejor para contener los esfuerzos de vigilancia y censura del Gobierno”, añadó en un comunicado.
De hecho, los medios oficiales iraníes se hicieron eco este viernes de manifestaciones en distintas ciudades, entre ellas Teherán, en la que defensores del Gobierno protestan por los disturbios sociales que se estarían generando en los últimos días, en un aparente intento por contraprogramar a las movilizaciones críticas con el régimen.
El fallecimiento de Amini ha desencadenado unas protestas en el país que se han saldado con al menos 17 muertos, según la cadena de televisión iraní Al Alam, si bien la organización no gubernamental Iran Human Rights (IHR) ha asegurado que al menos 31 civiles han muerto a causa de la represión.